sábado, 27 de octubre de 2012

Samurai, resturante japonés Sevilla

Pues nada Cuñada, mientras tú te paseabas por Logroño tapeando nosotros nos pasamos por el japonés que hacía mucho que no íbamos. Como sabes el restaurante Samurai tienen el menú diario a 6€ con algo, que además de baratísimo es una exageración de cantidad de comida (¡¡aunque todo está bueno y da pena dejarse nada!!), así que fuimos con la idea de pedir cosas sueltas para que fuese menos cantidad, por un lado, y para probar pidiendo algunas cosas diferentes, por otro.


Dicho y hecho, allí que nos plantamos, y qué bien comimos... como siempre vamos. Digamos que la comida japonesa tiene su parecido al Chino, pero mucho (muchísimo diría yo) más fina y delicada. Y para nada todo es Sushi (que por supuesto hay y para mi sorpresa está muy bueno), al contrario verás que no hay nada que se mueva en los platos, jeje. Además comimos con palillos como no puede ser de otra manera, pero aunque hay que aprender todo se deja comer muy bien con los palillos y no como en otros sitios donde te los ponen más de adorno que otra cosa.

 


Para empezar pedimos unos rollitos, que no son los del Tsi-Tao de San Sebastián, pero son muy parecidos. No te ponen la hoja de menta para enrollar con la lechuga pero bueno como últimamente allí o tampoco te la ponen o es anecdótica pues no hay mucha diferencia realmente. La salsa además es perfecta para el rollito. Buenísimo...
 

Cómo ir a un oriental y no pedir arroz, eso sí no tiene nada que ver con un arroz de un Chino, que están muy buenos normalmente, pero este es muchísimo más fino. Tiene muchas cosas, no se queda en las "tres delicias", y tiene una mezcla de sabores donde destaca pero sin molestar el aceite de sésamo tostado que le da un toque increible. El cocinero sabe lo que hace vamos. Y por supuesto ¡¡también se come con palillos!!...

Tempura. De verduras con langostinos (que no sé qué tamaño tenían, enormes) y pescado. En fin, aquí es donde se nota que el cocinero no está manco precisamente. Aunque como otras tempuras parece que todo es un mazacote cuando vas con los palillos pensando que tendrás que romper todo te encuentras que cada pieza está frita perfectamente individual... Sólo eso ya dice mucho, y el rebozado simplemente perfecto, vamos que ni por casualidad lo haces así en casa...

Y una brocheta de pollo Yakitori. La salsa que ves es una especie de caramelo de soja que le daba un sabor espectacular a todo. Además cuando se enfrió quedó efectivamente como un caramelo más duro, y hasta cogiéndolo con los palillos estaba buenísimo, en este caso literalmente para chupar el plato...


Aún pidiendo así platos sueltos de carta acabamos llenos, y sobró algo de comida (que si no les dices nada no te molestan, porque piensan que no has acabado, les extraña que te dejes algo...), así que no pedimos ni siquiera postre. Pero de todas maneras estuvo bien, te quedas lleno pero no exagerado como acabas con el menú. Todo, dos personas y bebidas, por 23 euros que está muy bien y de carta.





Si hay que poner algún pero, en el pollo de las brochetas nos encontramos algún trozo con pequeños huesos y cartílagos. Y en la tempura el pescado tenía la piel. Vamos, no es algo tremendamente importante dependiendo de lo tiquismiquis que seas, pero la verdad sorprende que siendo tan cuidadosos y estando tan bien cocinado todo se dejen detalles como esos. Claro, en realidad no conozco las costumbres japonesas, y a lo mejor allí es normal ese tipo de cosas (como son los japoneses vete a saber) pero que si las sopesamos con un criterio de costumbres occidentales pues la verdad es raro. De todas maneras esto es un japonés a precio del bar de la esquina, y menos incluso, así que ¿cómo le tenemos en cuenta eso, como si estuviésemos en un restaurante de alta cocina o como en el bar? La verdad es que no lo sé.

De todas maneras, es indudable que la comida es buenísima a pesar de esos detalles, y por ese precio poca objeción se le puede poner.

jueves, 25 de octubre de 2012

Logroño: Tapas (pintxos) por la Calle Laurel y su Travesía

Cuñao, el paseo obligatorio por Logroño es la famosísima calle Laurel. Corta pero intensa, tiene una concentración de bares que justifica su apodo de "senda de los elefantes" si la haces entera entrando en todos los que te encuentres. Cada bar tiene su pintxo recomendado, así que no hay que leer las pizarras o preguntar.

Te puedes imaginar que hay mucha información por internet, blogeros etc, así que yo me bajé ESTA GUIA que ayudó bastante y miré  ESTA WEB que es donde está alojada la guia.

Bueno hay que decir que es la Laurel y sus travesías, porque tiene varias calles perpendiculares que están repletas de tascas muy visitables.

El primero que visitamos es el recien estrenado "La Tavina", es más que un bar, ya que tiene vinoteca en la primera planta  y restaurante en la segunda, así que para todos los gustos ...




En este bar cayeron unos molletes de lomo.  Lo ponen rebozado y con pimiento rojo, queda muy suave y por supuesto riquisimo ... Como ves son tipo tapa aunque ellos lo llaman pintxo, por lo menos son más grandes que los pintxos de Donosti (y mucho más baratos), se parecen más a las tapas de Sevilla.


El Donosti (aupa !!!!) en la calle laurel nº 13, tienen varias especialidades, tostas de queso de cabra, berenjenas rellenas, pimientos rellenos.... y el cojonudo !! el huevito de codorniz, chorizo y pimiento ... delicioso !!


El  Jubera, en la calle laurel nº 18, tiene como especialidad las patatas bravas ... ricas pero sin más... ya siento... pero es que me chiflan y en patatas bravas tengo el listón muy alto.
Eso sí, allí tienen pasión por ellas, que conste!!

 
Otro... el Paganos, en la calle laurel nº 22. En este la especialidad es pincho moruno, pero la tortilla tenía una pinta excelente, así que la probamos y efectivamente estaba de primera.


El Soriano es un "must be". Está en la Travesía Laurel  nº 2 y lleva haciendo champis desde 1972.


Como ves, es el típico champi a la plancha con una gamba ensartada y el secreto como en muchos sitios está en el punto y la salsa.  Una delicia !!!
Lo hacen al momento, no hay que esperar mucho por su fácil  rápida elaboración, así que siempre calentito.


También en la travesía laurel nº4 está el Bar Lorenzo, aunque parece que todo el mundo lo conoce por Tio Agus.


Aquí hay que pedir las brochetas o los Tio Agus (bocatita), con o sin salsa. (la salsa de la abuela Damiana)


Aquí te presento al Tio Agus de chistorra, CON salsa, siempre con salsa, es una especie de pesto que le da toda la gracia y jugosidad al asunto.


Bueno, cuñao, no me voy a extender más con la calle Laurel.. entramos en alguno más y hay muuchos más,  pero estos son los que me dejaron muy buen recuerdo.

Los precios eran bastante parecidos entre si, los crianzas andan por 1,70 y cada pintxo otro 1,5, con lo que con un par de ellos, que te gastas más o menos 6 € y has cenado!!

En breve más post de pintxos

martes, 23 de octubre de 2012

Logroño: Restaurante Tondeluna (menú degustación)

Cuñao, ya sabes que hemos estado una semanita por La Rioja y ha sido un viaje precioso.
Nos lo organizaron desde la agencia de viajes "wine taste lovers" (dedicada al enoturismo) que pillé por internet y aparte de lo organizado también tuvimos tiempo de probar las bondades de la cocina riojana.
Llegamos al mediodía así que nada más llegar había que comer... fuimos al sitio de moda en Logroño: el Tondeluna.


Yo sabía de él porque ha sido premio nacional de interiorismo y la verdad es que es precioso. Todo madera, mucha madera a modo de bosque en uno de los laterales, colores tranquilos pero color, mesas comunales, cocina vista al público, y además el personal fue muy amable y dispuesto ...
Lo regentan Francis Paniego con su mujer Luisa, y les avalan alguna que otra estrella en sus otros restaurantes.


Hay varios menús, carta, etc, pero chico, ya que estábamos allí y no es excesivamente caro... nos marcamos el de degustación. (aunque a esos 30€ que ves en la carta hay que ir sumando cositas, pan, copas de vino ... al final 37 € por cabeza.)


Aquí vienen las fotos:
El pan: riquísimo... hubo que pedir más.


Las croquetas, imprescindibles en el Tondeluna.  Son la receta casera del restaurante Echaurren donde alguna estrella hay.
Son espectaculares y mira que hemos probado croquetas tu y yo (empezando por las de tu suegra...) pero estas son increibles, la bechamel es tan suave y cremosa que parecía requesón... una pasada.


El caviar... que chula la presentación...


El caviar es vino sobre una crema de queso de cabra. Buenísimo...


Barquetilla de anchoas con pimientos. Recordaba a escalivada pero por la delicadeza de los platos, se queda el asunto en 1 anchoa... (igual un poco escass) pero el pimiento suave, muy suave.


Ensaladilla rusa con mayonesa aireada. Muy fina y aquí creo que fue donde se acabó ya el pan...


En este punto parece que te vas a quedar con hambre porque sabes que sólo te quedan 2 platillos y hasta ahora han sido casi de bocado... pero todo está estudiado,  ahora vienen los "fuertes".
Rissotto con láminas de sepia.  Como explicarte.... a mi que me chifla el arroz: un locura de bueno!!


La hamburguesita...  los panecillos son al vapor (blandito guay),  la hamburguesita es de solomillo (o eso me pareció... ) y por supuesto tiene un sabor exquisito.
Como ves, y después de estos dos, y ya vamos cinco, el postre entra justito (por lo menos para mi, pero mi consorte hubiera agrandado un poco las raciones, seguro.)


Los postres: pedimos ayuda al camarero y al final fue quien los eligió.
Tarta de queso camero y manzana. Finísimo...  el queso camero es de Rioja.


Torrija en salsa de vainilla con helado de queso.  También muy rico.


Bueno, resumen, recomendable, muy recomendable !!
Está en los bajos del espolón, en la calle Muro de la Mata nº 9 de Logroño.

lunes, 15 de octubre de 2012

Taj Mahal, Restaurante Indio en Sevilla

Cuñada!! El otro día buscando me apareció este restaurante Indio por aquí, el Taj Mahal. Aunque en tiempos me parece que ya hubo en Sevilla algún Indio que ya no está este creo que es bastante nuevo, de ahí que ni supiésemos que estaba ahí. La verdad es que nunca había probado la comida India hasta que estuve en Inglaterra este verano (allí hay Indios por todos lados, y es lo único abierto si vas un poco tarde a comer o cenar), pero me gustó mucho, así que por supuesto teníamos que probar.



Primero te explico cómo funciona. En realidad los Indios por lo que parece son en todas partes igual, y hasta con los mismos platos con pequeñas diferencias dependiendo del cocinero. Por lo que me han contado además, aunque a veces traten de ir de cocina sofisticada en realidad es muy simple. La carta te la pueden organizar de diferentes maneras, pero en el fondo es tan sencillo como, unos pocos entrantes, y una serie de salsas diferentes que puedes mezclar con carnes distintas, pollo, cordero, cerdo, (ternera no!!). Y ya está. Claro, puedes mezclar todo con todo, pero según la salsa pega más con una u otra carne, ahí ya depende de cada uno y de probar a ver qué gusta más.


Total que con algo de miedo fuimos, pero la verdad es que nos aconsejaron muy bien. El camarero todo el tiempo nos explicó la carta, qué era cada cosa y nos aconsejó no pedir ni mucha cantidad, ni cosas muy raras hasta que probásemos primero, y nos insistió mucho es que de todas maneras si alguna de las salsas no nos gustaba nos cambiaría el plato.


Así que pedimos, algo de "pan" (nan se llama), pero no para comer con pan, en este caso con queso se usa de acompañamiento con los platos y como nos explicaron puede ayudar a suavizar sabores fuertes o picantes, como este, o por ejemplo el de ajo para potenciar ese sabor. Realmente pegaba muy bien con las salsas....

Esto es pollo palak, en teoría pollo en curry (aunque no tenía sabor fuerte a curry, casi costaba notarlo) con salsa de espinacas, muy suave, ligerísimamente picante por el curry, pero muy bueno...

Y esto cordero madras, que se supone que el cordero también está macerado en curry pero en este caso la salsa es más fuerte, esta sí picante aunque no mucho, y la verdad es que también sabía la salsa más que el curry, y con algunas verduras muy bueno también...


Como no pedimos demasiado pues también cayeron postres, y mira qué pintas. Esto es un hojaldre de harina de garbanzo con agua de rosas, almendras y alguna cosas más, se deshace completamente al comer y está buenísimo...

Y esto es un helado que ya no recuerdo de qué era (tienen una carta de postres a parte de la normal), pero en teoría es un helado de especias, entre ellas cardamomo que recuerde. De todas maneras era suave y puede que por el frío no era exagerado el sabor de las especias...


Cómo no, es corriente en los Indios que te traigan la cuenta en alguna caja típica...

Al final 33€ dos personas y comimos muy bien. Nos quedamos con ganas de pedir más cosas, otros entrantes, y de probar alguna cosilla más, pero para empezar no estuvo nada mal y preferimos seguir los consejos del propio camarero de no pedir demasiado por si acaso. Así que tendremos que ir a probar más cosas otro día. Ah, no sé si llegarán allí pero también llevan a domicilio, que es un hallazgo.

miércoles, 10 de octubre de 2012

Cómic y vino, buen matrimonio. "Los ignorantes" de Étienne Davodeau


"...Étienne Davodeau es un autor de cómic que no sabe casi nada del mundo del vino.
Richard Leroy es un viticultor que casi no ha leído cómics.
Pero los dos están rebosantes de buena voluntad y de curiosidad. ¿Por qué alguien decide consagrar su vida a dibujar cómics o a producir vino?
¿Cómo y para quién se hacen?  Para responder a estas preguntas, durante más de un año Étienne se ha ido a trabajar a los viñedos y a la bodega de Richard, quien, a su vez, se ha sumergido en el mundo del cómic.
Han abierto muchas botellas y leído bastantes cómics. Se han paseado en busca de autores y viticultores apasionados por su oficio.
Étienne Davodeau apuesta a que hay tantas formas de realizar un libro como de producir vino. Constata que ambos tienen ese poder, necesario y precioso, de unir a los seres humanos.
Los ignorantes nos propone el feliz relato de esta iniciación compartida..."  Ed. La Cúpula.


Cuñao, sin duda "Los ignorantes" de Étienne Davodeau es una de las novelas gráficas más bonitas que he leido nunca...  Es muy fácil de leer, de las que enganchan y necesitas buscar un ratín para seguir leyendo!  En algún momento hasta parece un documental de TV.  

Acuarelas en una sola gama de colores y mucho, muchísimo contenido, tanto que al final hay una relación  tipo índice de los cómics y los vinos que aparecen en el relato.(toda una biblia...)

Respeto, pasión, profesionalidad y procesos artesanales,  pueden ser los conceptos que predominan  esta novela, y la verdad es que empapa tanto que fijate... me voy de vacaciones cargada de novelas gráficas a la Rioja ....ya te contaré a la vuelta la experiencia entre viñedos y a ver qué pasa en la calle Laurel....


lunes, 8 de octubre de 2012

Helas, Restaurante griego en Sevilla

Bueno cuñada, pues como aún no vuelves por aquí no hemos tenido más remedio que volver al griego sin ti, jeje.

Ya lo conoces, el restaurante Helas, pero esta vez nos hemos quedado en la terraza. Y es que desde hace algún tiempo pusieron en práctica una, para mi, genial idea que no tenían anteriormente y eso que este restaurante lleva muchos años aquí, y es que empezaron a dar tapas, algunas de platos de la carta y lo que es más interesante otros que no hay en la carta del restaurante y que así se pueden probar. Así que te puedes quedar tanto en la terraza con buen tiempo como en el bar de la entrada y pedir un par de tapas, eso sí griegas, y comes estupendamente por un precio muy apañado.


Mira qué pintas. Para empezar, cómo ir a un griego y no pedir tzatziki, la salsa de yogur, pepino y ajo, que se usa con muchos platos o se come directamente con pan de pita (qué bueno también el pan) sin más, imprescindible y buenísima...


Esto se llama Spanakopita, hojaldre relleno de espinacas y feta, muy especiado, y el hojaldre debe ser especialidad de la casa porque cualquier cosa de hojaldre es impresionante aquí. Con decirte que no me gustan las espinacas y esto está bueno...

Esto es el clásico gyros pita. El mismo pan de pita abierto y relleno, en este caso de carne de cerdo macerada y asada con lechuga, tomate, cebolla, tzatziki y patata. Digamos que viene a ser lo que un kebab turco pero más sofisticado y de este lado del Bósforo, pero está buenísimo...

Pitas hay varias, cada una de una cosa, pues además del gyros pita esta es una pita vegetal, vamos sin carne, pero es que parece que a cualquier cosa que le pongas tzatziki ya está buena...

Y esto es un postre de hojaldre emborrachado en almíbar y relleno de crema. Aunque tenga el almíbar no es nada empalagoso, y la crema no sé qué tiene pero es impresionante. La nata es de adorno, pero le pega estupendamente. Y no está en la carta...




Pues ya ves. Un par de tapas y se come más que bien, yo me quedé llenísimo y por 20€ dos personas. Del restaurante no te cuento porque ya sabes cómo de bien se come, pero esto de poner tapas baratas es un invento y creo que fue un acierto por su parte. No en vano en Sevilla en tiempos llegó a haber tres restaurantes griegos, uno lo llegaste a conocer. Sólo queda éste y creo que no es por casualidad.

sábado, 6 de octubre de 2012

Paseo por Pamplona II: comer en la Mar Salada

Cuñao, mira ... después del paseo por la parte vieja  pamplonica, reservamos para comer en un sitio que me habían recomendado insistentemente, y te diré que comí con babero y tenazas ... suena bien, verdad??



El sitio en cuestión es LA MAR SALADA y está en la calle Leyre nº 12 (muy cerca de la plaza de toros) y me lo recomendaron por la decoración del sitio.  Tiene una mezcla de minimalismo, con toques nórdicos maderosos y un algo de campestre que me encanta.

El comedor es amplio, pero además tienen unas peceras que son reservados para estar con tu gente y tener algo de privacidad.  Por cierto! estos reservados tienen las paredes adornadas con los hierros del peine de los vientos donostiarras, así que casi como en casa.


El baño no me puede gustar más ...


Bueno, he de decir que también me lo recomendaron porque como sabes, me chifla el arroz, y este restaurante es especialista en arroces, cazuelas, pescados etc. así que supuse que habría uno de mis platos favoritos: el arroz caldoso con bogavante.


Et voila !! pedazo de ración ... supuestamente solo se puede pedir para dos, pero como fuimos muy prontito y casi no había gente, nos dejaron pedir los arroces individualmente, así que cayó el arroz caldoso de bogavante como está mandao !!!!

Estaba rico, no es el mejor que he comido en mi vida, pero se dejaba comer amablemente, para mi gusto estaba un poco fuerte, pero ya te digo, muy bueno.


Por supuesto al final lo comimos entre los dos ... y de segundo (que yo probé justo), cayó un solomillo gratinado con queso y hongos. Muy bueno también.


Para el regadío pedimos que nos aconsejaran algo de la tierra y nos sirvieron un vino blanco Otazu del 2010, un chardonnay cultivado en Etxauri, Navarra.
Afrutado y muy indicado para el arroz conbogavante (no sé yo si para el solomillo también, pero vaya ... que bien fresquito entraba genial).


Como milagrosamente había hueco para el postre, (te juro que soñaba con el sorbete de mojito del ikaitz), pedimos la carta, y fíjate qué suerte que aquí también lo hacen.


Así que pedimos el sorbete de mojito y tarta de manzana fina con helado de vainilla.


... y la dolorosa .... fue 75 € ... bueno, me pareció un pelín carillo, pero bueno, habiendo bogavante por medio no me esperaba menos.  De todas formas y como crítica, yo por ese precio quiero mantel.

Añadiré que nos trataron superbien, fueron muy amables en todo momento pero sin ser pesados, que eso hay veces que no tiene precio.  En fin, que lo recomendaría, desde luego, pero no para repetir, la siguiente vez buscaremos otro para probar otras cosas.